Interpretación Completa + Ritual De La Carta N° 39: San Jorge Y Los Dragones. Una De Las “Cartas Mágicas”

San Jorge y los Dragones.

San Jorge es un bravo guerrero espiritual que vivió en Libia alrededor del año 275 DC. Protector de todos los guerreros y los caballeros, encarna a la fuerza redentora del espíritu que derrota a los “dragones”, las fuerzas salvajes y no redimidas que nos hacen sufrir. San Jorge hunde su lanza en toda adversidad, toda injusticia, toda maldad consciente o inconsciente, toda crueldad que nos atosigue. También hay dragones durmiendo en nuestro interior que irrumpen a veces en forma de un descontrol de nuestra vida, una ira profunda, un caos que no sabemos manejar, un desorden generalizado en todos los aspectos. El dragón que San Jorge venció en la Capadocia encarna a todos estos los dragones, incluido el del miedo. El dragón del Miedo, muy presente en la Vieja Tierra, se alimenta y crece con los miedos colectivos, y también con los millones de miedos personales que intoxican la atmósfera. El miedo a la soledad, al abandono, a la pobreza. El miedo al miedo. San Jorge también nos libera de esos estados de ánimo vagos y pegajosos que nos inundan a veces sin motivo concreto, quitándonos la alegría.
El encontrarnos por azar con San Jorge a través de una Carta Mágica, es una llamada de atención de que es preciso iluminar nuestros miedos, ordenar todo caos. Alejar la melancolía. Pedir ayuda a San Jorge para salir de situaciones con las que venimos luchando solos y no podemos trascender. Someter a todo dragón interno o externo que nos amenace y redimirlo, o sea, enfrentarlo con la Luz. La Carta también puede anunciar tiempo de grandes confrontaciones y el posterior advenimiento de una nueva situación positiva y luminosa.
Dones: Liberación de ataduras. Liberación de estados de ánimo negativos. Apertura de caminos trabados. Liberación de adversidades. Independización de toda esclavitud física, moral, mental o psicológica. Carga de valor y audacia espiritual. Purificación de situaciones viciadas. Liberación de adicciones.

Ritual: Durante 3 o 9 días, en total soledad, y después de las 9 de la noche, prender una vela roja mirando el Norte y con voz pausada y firme, cargada de emotividad y valor recitar la oración de San Jorge haciendo la señal de la cruz al final de cada párrafo: -Glorioso protector mío, San Jorge.+ Victorioso guerrero que tu vida diste por el Cristo. + Resplandezca Su luz y Su paz en mi vida.+ Vence al maligno adversario.+ Enemigos y adversidades huyan.+ Nada temo si Tu me acompañas.+ Con Tu manto cúbreme y con Tu luz defiéndeme en el combate.+ Te suplico con humildad y confianza.+ Oye mi oración y preséntala ante el Cristo.+ Y contigo, con todos los ángeles y los santos y desde las profundidades de mi corazón clamo: Santo Dios, Santo fuerte, Santo Inmortal: Ten piedad de nosotros . Amén.+